A tan sólo hora y media en coche desde Roma hacia el norte, se encuentra Asís, una pequeña ciudad con mucho encanto y conocida mundialmente por ser el lugar en el cual nació San Francisco de Asís. Este nacimiento ha marcado a la villa, ya que sus principales edificios se refieren a este Santo, fundador de la orden religiosa de los franciscanos en 1208, y Santa Clara (Chiara d’Offreducci), la fundadora de las clarisas. También nació aquí San Gabriel de Nuestra Señora de los Socorros en el siglo XIX. Según el censo italiano de 2003, la municipalidad (comune en italiano) contaba con 25.600 habitantes en un área de cerca de 187 km². La ciudad en sí cuenta con una población de cerca de 5.500 personas.

 


 

Assisi: via S.Francesco
Assisi: via S.Francesco

De origen umbro se convierte en municipio romano con el nombre de Asisium. Hasta el siglo XIII la extensión del centro medieval coincide con el de época romana. El obispo Rufino lo evangelizó en el 238 d. de C. y lo asediaron los Godos de Totila en el 545. Formó parte del Ducado de Spoleto longobardo y franco. En el siglo XI llega a ser Municipio libre de ideas gibellinas, al contrario que la güelfa Perugia. En el 1189, en ausencia del vicario imperial, Corrado di Lutzen, los habitantes de Asís tomaron la fortaleza. Perugia quiso intervenir en la liberación de la ciudad, por lo que los asisanos marcharon contra ella. Fueron derrotados en Ponte S. Giovanni. Uno de los prisioneros que cayó en manos de los peruginos era un joven de veintidós años, llamado Giovanni di Bernardone pero conocido con el nombre de Francisco. Era hijo del rico comerciante de tejidos Pietro di Bernardone, cuya familia procedía de Lucca, y de su mujer, de origen provenzal, Pica. Nació entre el 1181 y el 1182. Tras la aventura perugina decide dedicarse a la guerra, por lo que participa en la cruzada de Gualtiero di Brienne, pero una enfermedad le obliga a volver atrás. Mientras tanto, en el 1197, el futuro emperador Federico II recibe el bautismo, tres años después de su nacimiento, en la plaza del mercado de Jesi (en Marche). Francisco cambia su vida, renuncia a las riquezas y comodidades que le ofrecía su posición. Tiene su primera visión en San Damiano, en la que el santo le impone la reconstrucción de la Iglesia (1205). En el 1208 Francisco, que ha obtenido de los benedictinos la capilla de di S. Maria degli Angeli, conocida como "La Porziuncola", funda la orden de los "Frati Minori". Tras el encuentro con Clara di Favarone di Offreduccio, miembro de una familia noble de Asís, funda una segunda orden en el 1212, el de las Clarisas. En 1221 aparece la tercera orden, de carácter laico, en Cannara. En 1224 recibe los estigmas en La Verna (Arezzo) y en 1226 muere en la Porziuncola. Dos años más tarde se le proclama santo y un día después el Papa Gregorio IX posa la primera piedra de la futura iglesia y convento, voluntad de Frà Elia, compañero del Santo. Santa Clara también fue canonizada dos años después de su muerte, en el 1253, y un año más tarde se inicia la construcción de la iglesia dedicada a ella.

 

 

 

A pesar de la presencia de estos dos eminentes personajes, la historia de Asís se vió poco afectada por su importancia religiosa. En 1316 se amplía la muralla hasta englobar el complejo de San Francesco, el convento benedictino de San Pietro y el Burgo Aretino. La decadencia de Asís inicia tras la peste del 1348. Para asegurar el dominio de la Iglesia, el Cardenal Egidio Albornoz mandó construir sobre los restos de la fortaleza imperial la "Rocca Maggiore" (1367). Desde el siglo XIV y hasta el XVI se produjeron continuos combates entre las dos principales familias del lugar, los Nepis (de la "Parte de Sopra") y los Fiumi (de la "Parte de Sotto") a pesar de que la ciudad estuviera sotometida durante largos años a distintas señorías (Biordo Michelotti, Broglio di Trinci, Galeazzo Visconti, Braccio Fortebraccio, Francesco Sforza, Jacopo Piccinino). Sólo con Pio II Piccolomini (1458-64) la ciudad pasó definitivamente a manos de la Iglesia.

Visitas:

* Convento y la Basílica de San Francisco

El Convento y la Basílica de San Francisco constituyen un conjunto arquitectónico de gran interés. La Basílica está formada por dos iglesias superpuestas, la fachada, adornada con un doble rosetón, y el campanario que data del año 1239. En la plaza inferior, porticada y del siglo XV, se encuentra la entrada a la Iglesia Inferior, que es el santuario donde reposan los restos del Santo situados en la cripta que se compone de una sola nave de columnas bajas. De aquí a la explanada de ingreso que conduce al Claustro, de estilos románico-gótico, con una nave decorada con frescos del llamado Maestro de San Francisco del siglo XIII. En esta Iglesia Inferior se pueden contemplar diversas capillas entre las que destacan la tercera de la derecha, la de la Magdalena, decorada con frescos atribuidos a Giotto y sus discípulos del año 1314 y la primera de la izquierda, decorada por Simone Martini con Historias de la vida de San Martín de los años 1322 y 1326. La bóveda del ábside está adornada con frescos alegóricos de la escuela de Giotto. En el ábside se puede admirar un coro de madera del siglo XV con formas góticas. En el brazo izquierdo del crucero resaltan los frescos de Pietro Lorenzetti representando la Pasión y en el derecho los frescos de Giotto y sus discípulos representando historias de la vida de Cristo. A través de este Crucero se accede a la Iglesia Superior, de estilo gótico, en la que se pueden ver, en la parte baja la famosa serie de frescos de Giotto que representan 28 escenas de la vida de San Francisco de Asís y en la parte alta, los frescos de la Escuela de Cimabue y Romana, I. Torriti. En el Crucero se muestran pinturas al fresco de Cimabue y discípulos y en el ábside, el coro tallado de madera del siglo XV (en el año de 1997 Asís sufrió un fuerte terremoto que provoco serios daños en el conjunto histórico. Algunos frescos se han perdido para siempre).
El Tesoro contiene maravillosas pinturas de los siglos XIII-XV, excelentes tapices de los siglos XV-XVI, magistrales vestimentas sacerdotales y mobiliario de los siglos XIII-XVIII.


* Convento de San Damiano

Este convento fue edificado en el siglo XIII alrededor del oratorio campestre, en el que se supone que el Crucifijo habló a San Francisco en el año 1205. Al lado de la pequeña iglesia está el Jardín de Santa Clara en el cual se dice que el Santo compuso el Cántico de las Criaturas.


* Eremo delle Carceri

 

Antiguo eremitorio del siglo XIV, situado a unos 5 km. de Asís subiendo al monte Subasio. Está construido sobre el lugar donde San Francisco y sus seguidores se retiraban (se encarcelaban) a orar, cerca de una pequeña iglesia rodeada de grutas frecuentadas por eremitas ya en tiempos paleocristianos. Se narra que el nombre de Carceri (cárceles) puede ser debido al significado de la palabra “Carcel”: Sacro Retiro.
En su inicio era solo un pequeño oratorio que pareció a Francisco el sitio adecuado para la penitencia y la contemplación.


* Basílica de Santa Clara

En su interior conserva los restos mortales de la Santa. Del templo destaca el rosetón de su fachada y las obras de arte que se guardan en el interior de la basílica, como el famoso Crucifijo pintado sobre una tabla, del siglo XII, que se cree habló a San Francisco en la iglesia de Santo Domingo.


* Catedral

Templo austero, dedicado a San Rufino, que fue erigido entre los siglos XII y XIII.


* Iglesia de San Pedro

Templo del siglo XIII construido en estilo románico-gótico.


CASTILLOS Y FORTALEZAS

* Rocca Maggiore
Fortaleza del siglo XIV.